jueves, noviembre 28, 2013

Viaje a Sarajevo (2º Día - 2ª Parte)


Nos habiamos quedado a media mañana en el War Memorial Kovaçi. Una vez hechas las fotos correspondientes y de haber quedado realmente impactado con las imagenes y el silencio que allí reinaba, tomé la calle Mula Mustafe Baseskije para atravesar el casco viejo de la ciudad. 


Mi siguiente destino fue la la Vieja Iglesia Ortodoxa que se encuentra a pocos minutos del Memorial, para luego tomar la calle Logvina y subir hacia el Svarzo House y la Acedemia de las Artes Islamicas.


De ahí fui bajando por la calle Saraçi, una calle repleta de gente (aunque en esta foto no se vea demasiada gente) y de terrazas donde la gente pasaba el tiempo tomando café, para llegar al centro del Casco Viejo, donde uno puede disfrutar de la Morica Han, de la Kursumilja madrasah y de la Sinagoga II Karl Vjezu.


Poco a poco, disfrutando de un agradable paseo, llegué hasta hasta un parque que hay en el centro de la ciudad donde además hay un monumento a todos los niños muertos en la guerra.


Allí me senté en un banco a descansar un poco, a lo tonto llevaba más de tres horas sin parar de andar recorriendome todo el centro de Sarajevo con una temperatura de unos veinticinco grados, según marcaba uno de los termometros de la plaza. Momento que aproveché para hacer alguna foto de la zona y contemplar relajadamente el ritmo, más o menos tranquilo, que mueve a la capital Bosnia.


Aunque me encontré con un McDonalds en la Calle Cemalusa, calle donde se encuentra la Llama Eterna, decidí volver caminando hacía el casco viejo para buscar un sitio donde parar a comer.


Fue en la zona de la Mezquita Gazi Husrev bey's, en pleno casco viejo, donde encontré una plaza con varios restaurantes donde parar a comer, así que sin preocuparme mucho donde me sentaba, entré en el primero en el que vi una sombrita, ya que no teía muchas ganas de comer al sol después de más de tres horas camnando bajo un intenso calor.

Eran casi las dos de la tarde, y me pedí una Pizza Cuatro Quesos (8KM - 4€), una buena jarra grande de cerveza (4,5 KM - 2,25€), y un café expreso (1,5 KM - 0,75€).


Y a eso de las 15:00, una vez habia repuesto las fuerzas, abandoné el restaurante para pasearme un poco de nuevo por el casco viejo de la ciudad, era más o menos pronto y me quedaba mucho día por delante, asi que decidí tomarmelo con tranquilidad y disfrutar del ambiente comercial de la zona.

Continua ...

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