Décimo Día en Nueva York

Y llegamos al que posiblemente sea el último articulo en el blog sobre mi estancía en Nueva York, porque aunque ne realidad me queda un día aqui, el día de mañana, la verdad es que no tendré tiempo más que de limpiar la casa y salir prontito hacia el aeropuerto, así que se puede decir que hoy martes ha sido nuestro último día en la Gran Manzana.

Tal y como teniamos previsto, hemos salido pronto de casa, a eso de las nueve y media de la mañana, hemos cogido el metro y hemos bajado hacia el Puente de Brooklyn para coger el Ferry que te lleva a Staten Island.

Se trata de un servicio público gratuito que comunica este gran barrio, tengo entendido que viven más de 500.000 personas en él, con Manhattan, y hay que decir que se trata de un servicio rápido y bien organizado que comunica ambas islas cada media hora más o menos.

Además, durante el breve trayecto de 25 minutos, uno puede disfrutar de las vistas del Skyline de Nueva York o de la imagen de la Estatua de la Libertad, ya que se pasa realmente cerca de ella.

Según pone en la guia turistica de la ciudad, son muchos los turistas que cogen este Ferry para darse una vuelta por la bahía, pero nada más llegar se cogen el Ferry de vuelta para volver a Manhattan.

Nosotros en cambio hemos sido más curiosos, y ya que esta parte de Nueva York fue una de las más afectadas por la tormenta Sandy, hemos decidido dar una vuelta para ver si se veían desperfectos en la zona.

 No hemos visto muchos daños, es más, yo diría que ninguno, pero viendo como tienen montado el sistema eléctrico de las casas, no me extraña en absoluto que con la llegada de una fuerte tormenta se produzcan problemas de suministro.

Después de dar una vuelta por el barrio, hemos cogido el Ferry de vuelta y a eso de las 13:00 aproximadamente nos hemos plantado de nuevo en el centro financiero de Manhattan, asi que hemos aprovechado para pasarnos por los almacenes Century 21 y hacer las últimas compras.
  

Entre una cosa y otra nos han dado más de las tres de la tarde, asi que hemos hecho un breve parentesís para comer y tomar un café al más puro estilo americano, vaso en mano y paseando por la calle.

Y de allí, vuelta a coger el metro y a la Calle 86. Hemos pasado por casa, hemos dejado las bolsas, y nos hemos ido a dar una vuelta por la zona a intentar localizar una librería, que aunque parezca mentira, no hemos visto ninguna desde que hemos llegado.

Yo había localizado una cerca por internet, pero al llegar a ella nos hemos encontrado con que era una libreria especializada en libros de cocina unicamente, así que nada, nos hemos dado una vuelta por la zona, hemos hecho la compra de la cena en el supermercado, y nos hemos retirado a casa a empezar a ordenar las maletas, que teniendo en cuenta lo que hemos comprado, no va a ser tarea fácil.