Sabado en Oviedo

Ya estoy de vuelta de mi fin de semana agotador de trabajo, la verdad es que tampoco es que el trabajo haya sido excesivo, pero bueno, hemos andado de lado a lado y con poco tiempo para dormir, algo que se ha visto incrementado también por el cambio horario del sábado a la noche, entre una cosa y otra, para cuando quisimos darnos cuenta estábamos entrando en la habitación del Hotel a eso de las 2 de la mañana, hora que se convertía por en las 3 de la madrugada en tan solo el tiempo que tardábamos en cambiar la hora en nuestros relojes, pero es lo que tiene este trabajo, así que no hay porque lamentarse más.

El trabajo allí como ya anunciaba fue sencillo, se trata de uno de esos trabajos en los que no hay demasiadas complicaciones, el único problema el de siempre, la cantidad de horas que uno pasa en el reciento esperando el momento de realizar propiamente el trabajo.


El acceso al teatro era muy fácil, por lo que en pocas horas teníamos todo montado y probado. Además el teatro en el que se realizaba la grabación estaba situado justo en el centro de Oviedo, lo que me permitió darme alguna vueltilla por la zona para hacer un poco de turismo, como se puede ver en las siguientes fotos:

Catedral de Oviedo.

Haciendo el tonto en una de las muchas estatuas que hay repartidas por la ciudad, esta estaba justo delante del Hotel donde nos hospedábamos.