Uno de los accesorios de cámara más utilizado en las producciones de cierta calidad televisiva, y en casi todas las cinematográficas, es el Portafiltros.
Se trata de un accesorio que se acopla delante de la óptica de la cámara y que permite luego colocar sobre la lente diferentes filtros que afectaran a la imagen captada por la cámara.
Quizás el Portafiltros, aunque a simple vista parezca un artilugio complejo, sea lo más simple y sobre todo barato, de este juego de accesorios, ya que en realidad lo más caro y lo que realmente nos permite variar la imagen que grabamos son los filtros que luego utilizaremos con este accesorio.
Hay diferentes tipos de filtros, desde degradados que permiten variar la intensidad de la luz de la toma realizada, hasta filtros de colores que permiten alterar la colorimetria de la imagen (estos son muy utilizados para lograr las típicas imágenes impactantes de aguas azules y cristalinas).
Pero posiblemente los más utilizados, por su función, son los polarizadores. Estos filtros permiten eliminar en la imagen molestos reflejos que podemos tener en superficies como el agua, cristales o espejos.
Encima de estas lineas tenéis un ejemplo, arriba esta la imagen captada sin polarizador y abajo el resultado utilizando un filtro polarizador.
De todas formas que nadie se piense que un filtro polarizador es fácil de utilizar, no basta con poner el filtro delante del objetivo para lograr hacer desaparecer los molestos reflejos, deberemos ajustar su posición hasta lograr el resultado buscado, ya que el filtro polarizador actúa de manera diferente según sea su posición delante del objetivo.
Lo que esta claro es que una simple cámara con un portafiltros colocado delante de su óptica adquiere una imagen mucho más profesional que llega incluso a impactar:
1 comentario:
Enano sos un grosoooo!!!!
Apartir de este momento soy tu fan number one!!! jeje
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