Los vientos pueden alcanzar los 120 o 140 kilómetros por hora en algunas partes.
No es la primera vez que esta fuerza de la naturaleza afecta al litoral cantábrico. En diciembre de 1998 provoco el hundimiento del pesquero vasco "Marero". El mar se tragó a sus ocho tripulantes.
Y os preguntareis, ¿A que viene este interés repentino por este tipo de acontecimientos climatologicos?, pues muy sencillo, porque desde esta pasada noche aquí en Donostía estamos sufriendo las molestias originadas por una tormenta de este tipo.
Como se suele decir "más vale prevenir que lamentar", pero desde luego viendo las imágenes que mostraban ayer las ediciones digitales de diferentes periódicos o de algunos informativos de la televisión parecía como si estuviesemos ante la llegada de un Huracán de proporciones bestiales.
Se retiraban los vehículos y contenedores de las calles próximas al mar, a las cuales logicamente estaba prohibida la entrada de los curiosos. Se tapaban con maderas escaparates y puertas de locales próximos a las zonas costeras.
En los medios de comunicación se alertaba a la gente para que no se acercasen a andamios y arboles y que evitasen coger vehículos ligeros como las motos.
Hoy sábado se han suspendido todas las competiciones deportivas escolares al aire libre, incluso se ha llegado a aplazar alguna competición deportiva más seria.
He tardado en escribir el articulo porque estaba intentando hacerme con alguna imagen sobre los posibles destrozos ocasionados por el mar durante la noche, pero de momento no he encontrado nada.
Esperemos que la fuerza de la naturaleza no haya sido tan agresiva como lo fue el año pasado, Marzo del 2008 (podéis recordarlo pinchando aquí), y que no haya causado tantos destrozos.
Desde luego a estas horas (9:30 de la mañana) os puedo adelantar que ayer a la noche dejaron de verse la mayoría de las cadenas de televisión, solo se podían ver las locales, en cambio hoy son estas las que no se ven, seguramente por algún problema ocasionado por el viento en los repetidores.
Y ahora mismo puedo ver por la ventana como soplan rachas de viento verdaderamente fuertes que hacen temblar cristales y tenderetes como si quisiese arrancarlos de cuajo.
De momento os dejo una foto sacada por el amigo Sergio en uno de los puentes de Donostía durante uno de los temporales del año pasado. Yo hoy me quedaré en casita a refugio viendo la tele y jugando a la consola para no correr peligro ante tales condiciones climatologicas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario