sábado, enero 12, 2008

Enganchado a la X-Box

Supongo que los que me leéis asiduamente esta mañana os habréis extrañado de que no hubiese ninguna entrada nueva en el blog.

Es verdad, tengo la costumbre de publicar los nuevos artículos a primera hora de la mañana lo que provoca que se haga extraño no tener nada nuevo publicado a estas horas, las 14:15 de la tarde, pero todo tiene su explicación.

Ayer, viernes noche, invite a mi madre, mi abuela y Miguel a cenar en la Sociedad Loyolatarra, como os comenté hace poco se ha inaugurado la nueva sede y aún no habían tenido oportunidad de conocerla, así que preparé algo sencillito para cenar (revuelto de champis con ajitos y pechugas de pollo con salsa roquefort) y nos juntamos allí los cuatro.

Para las 23:00 de la noche ya estábamos retirándonos a casa, el problema vino después, como era relativamente pronto encendí la X-Box, me puse a jugar un poco, al principio solo, luego se unió el amigo Santi, y al final acabe jugando con un tío muy majo de México DF, resultado, las 6:30 de la mañana, así que ya tenéis la explicación de porque me he levantado tan tarde hoy sábado, lo que ha provocado que hasta estas horas no hubiese nada nuevo publicado.

Buenas horas de diversión que proporciona la consola, ahora, también es verdad que hay que controlarse, porque a este ritmo me voy a quedar pegado a ella.

No hay comentarios: