Se trata de un accidente de avioneta que sucedió el sábado en las proximidades del aeropuerto de San Sebastian a eso de las 12 del mediodía. Sinceramente yo ni me había enterado del suceso hasta que me han mandado esta foto, es verdad que suelo leer los periódicos por Internet y que veo los informativos todos los días, aunque los de ámbito nacional, pero admito que no me había enterado de la noticia hasta este lunes (es lo que tiene estar de baja y un poco desconectado del mundo).
Parece ser que la avioneta venía de Huesca, en ella viajaban tres ocupantes, y al realizar la maniobra de aproximación al aeropuerto chocó contra unos cables de alta tensión de la zona. Afortunadamente no hubo victimas, y los ocupantes de la aeronave salieron sanos y salvos por su propio pie del accidente.
Pero lo que me ha hecho escribir este articulo no es el accidente en sí, que no deja de ser un suceso local más en el que como digo además no ha ocurrido ninguna desgracia, si no el hecho de pensar lo endebles que en determinados momentos parecen este tipo de aparatos.
Como ya os he solido comentar yo no tengo miedo a volar ni mucho menos, si no todo lo contrario, pero hay que reconocer que no es lo mismo montarse en un gran avión comercial, que da sensación de robustez y seguridad, que en un pequeño artilugio de este tipo que parece en ocasiones incluso más debil y fragil que nuestro propio coche.
No sé si habeis tenido oportunidad de montar alguna vez en avioneta, yo he tenido la suerte de hacerlo en dos ocasiones (siempre por trabajo) y os aseguro que la sensación a mi me ha encantado, aunque reconozco que cuando uno esta subido a un pequeño pájaro de estos a uno se le pasa por la cabeza lo de "¿Y si se para el motor ... ?".
Por supuesto que es dificil, ¿Cuantas veces se nos ha parado el motor del coche en marcha?, a mi desde luego pocas, pero no podemos obviar que en ocasiones pasa, y en el coche uno pone las luces de emergencia, se echa a la cuneta y llama a la grua, pero aqui las circunstancias son diferentes, ni podemos parar en la cuneta, ni podemos llamar a ninguna grua, en ese caso lo más importante es aprovecharse bien de las corrientes de aire e inentar bajar lo menos bruscamente posible.
Es por esto por lo que me he hecho varis preguntas que aquí os planteó:
¿Habeis montado alguna vez en avioneta?, ¿Montariais si tuvieseis oprtunidad, o os da miedo este tipo de transporte?
2 comentarios:
.-IGNIGO: Pues no, en este tipo de avionetas no he volado; pero sí que lo he hecho, y bastante, en otro artilugio volador todavía más endeble que esa avioneta que hay en la foto: se trata de los U.L.M. o "ultraligeros a motor".
.-Me saqué el título de U.L.M. y estuve volando los fines de semana durante un año. Lo que pasa es que debido al elevado coste económico del deporte, tuve que dejarlo. Desde entonces, no he vuelto a volar, no he renovado el reconocimiento médico necesario ni he cubierto la hora mínima de vuelo anual que hace falta para renovar la licencia.
.-Ahora bien, la experiencia fue muy muy positiva. Las sensaciones de vuelo son grandísimas, cualquier corriente o térmica la notas en los movimientos del aparato. El despegue era lo que más miedo me daba, y en cambio el aterrizaje era lo que más me gustaba y lo que más a prueba ponía a mis nervios...
.-Hay una consigna en vuelo que dice que si quieres volar seguro, vuela alto. Por eso, en relación a lo que comentas de aterrizar en caso de parada del motor, pues nada, no hay que preocuparse ni perder los nervios. Lo único que hay que hacer, es siempre volar alto, y si se para el motor, ir bajando planeando poco a poco, divisar un campo de sembrado, o un camino o una carretera secundaria e intentar el aterrizaje forzoso, nada más y nada menos, je, je.
.-Saludos y a volar...
¡Que envidia me das!
Siempre he querido sacarme un titulo de ese tipo y poder volar como tu comentas.
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